Seguro que conocéis a personas que caminan dando pequeños saltos, es una forma de andar muy característica. Y no es una manía o algo que se pueda controlar. Este tipo de forma de andar se debe a un equino de tobillo, que no es lo mismo que tener el tobillo de un equino.

Os lo explicamos: el equino de tobillo es una limitación en el movimiento de la articulación del tobillo. Por la razón que sea, bien muscular o debido a un origen óseo (hay muchas causas dentro de estos dos orígenes), se verá que hay muy poco apoyo del talón mientras caminamos. En muchos casos el talón contacta muy poco tiempo con el suelo y en algunos otros el talón ni siquiera contacta con el suelo al caminar.

Como podéis imaginar, esto da lugar a muchos problemas ya que para poder seguir caminando aparecerán compensaciones en otras partes del cuerpo. En el pie es muy frecuente que se tenga:

• Dolor en la planta del antepie (metatarsalgia)..
• Lesiones en la piel (callos y durezas /helomas e hiperqueratosis)
• Deformidades en la cara dorsal del antepie.
• Deformidades en los dedos.

Al hacer el estudio biomecánico, el registro de la huella con la plataforma de presiones nos da una imagen muy característica. Si miramos la imagen, se ve una línea de puntos negra. Aparece en la zona del mediopie y acaba en los dedos. Esa línea representa como se desplaza a lo largo de nuestro pie el peso del cuerpo. Y que esa línea aparezca desde la zona del talón es lo que se considera normal.